Galletas esqueleto para halloween (sabor chocolate)

Hoy ha sido uno de esos días reposteros en los que todo te sale mal. Empecé la mañana preparando un bizcocho de calabaza asada con pepitas de chocolate, todo iba perfectamente hasta que llegó el momento de desmoldar, mira que me joroba que se me vaya todo al garete por este tema, pues nada, no pudo ser, medio bizcocho pegado, eso si, estaba increíble. Afortunadamente todavía me queda calabaza asada para un segundo intento. Y las galletas esqueleto, eran mi segunda receta, todo iba bien hasta que me di cuenta que olía a quemado, efectivamente la primera hornada quemada, la segunda y tercera ya salieron mejor. Empecé haciendo una especie de esqueleto, el cráneo se me resiste, nunca había decorado galletas con textura, no había forma de que quedará como yo quería, terminé haciendo momias. Y al final no pensaba subir nada, pero digo bueno, aunque no haya salido como a mi me gustaría, lo mismo hay alguien a la que si le gusta, por cierto que de sabor están perfectas. Pues por todos ellos, aquí tenéis las galletas que iban para esqueleto y se quedaron en momia. Hasta pronto...

Pastas bonitas (con manga pastelera)

Llevaba ya un tiempo queriendo hacer pastas pero utilizando la manga pastelera. Es la primera vez que las hago y bueno, el resultado no está nada mal, mejorable claro, a nivel estético, pero de sabor, están buenísimas, me han recordado a las típicas pastas que he comprado alguna vez en cualquier pastelería.  Guauuu que ricas y delicadas, con ingredientes muy sencillos y se hacen en un periquete. Animaros que están ¡pa comerselas!.

Magdalenas súper esponjosas de Modesta, mi querida madre.

Dia lluvioso, horno en funcionamiento, mi madre a mi vera, por fin se ha traido sus vasos medidores y todo lo necesario para hacer unas magdalenas-sobaos (no se como denominarlas de lo especiales que son ) es lo más esponjoso que yo he visto y catado jamás. La verdad es que mi madre siempre las hace y nos las trae, y no se por qué nunca le he pedido la receta, supongo que por la comodidad de que siempre se que las hace. Su forma de hacerlas es un tanto peculiar, yo he transcrito exactamente lo que me ha ido indicando y bueno, el resultado es increíble, han salido un montón, su tacto es esponjoso, son blanditas, suaves, dulces, que puedo decir más, tenéis que hacerlas porque son únicas. Y no os digo nada más, os dejo con la receta de mi madre, con todo el cariño.